Hoy os traemos una de esas recetas que os gustan tanto y es una recopilación de recetas ideales par...
Sí, muchas de las recetas con bechamel se pueden congelar una vez cocidas. Asegúrate de almacenarlas en recipientes aptos para congelación.
Sí, puedes sustituir la harina de trigo por harina de maíz para hacer una bechamel sin gluten. Ten en cuenta que la textura puede variar ligeramente.
Sí, puedes utilizar leche desnatada y reducir la cantidad de mantequilla para hacer una bechamel más ligera o baja en calorías. También puedes probar alternativas como la leche de almendra o de avena.
Si la bechamel queda demasiado líquida, puedes añadir un poco más de harina disuelta en leche fría y calentar la mezcla hasta que espese. También puedes dejar que hierva un poco más para reducir el exceso de líquido.
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