Esta receta conquista por su textura sedosa, sabor delicado y la practicidad que ofrece el robot de cocina más amado en las cocinas españolas. Olvídate de la tradicional crema pastelera con huevo y atrévete a preparar una versión ligera y saludable, que además puedes adaptar fácilmente con leches vegetales para una opción vegana.
En este artículo te explico cómo hacer paso a paso esta crema de vainilla sin huevo con Thermomix, te doy consejos para un resultado impecable y te sugiero ideas para que la uses en múltiples postres. Prepárate para convertirte en el maestro de la crema que encantará a todos.
Para esta receta necesitarás ingredientes sencillos que probablemente ya tengas en casa. La clave está en la calidad, especialmente de la vainilla y la leche, que harán que el sabor destaque sin necesidad de ingredientes complicados.
🥛 500 ml de leche (puede ser entera o vegetal: avena, soja, almendra)
🍬 80 g de azúcar
🌽 50 g de fécula de maíz (Maizena), ajusta según la consistencia deseada
🌿 1 vaina de vainilla o 1 cucharada de extracto de vainilla
🧈 20 g de mantequilla o margarina vegetal (opcional, para un acabado brillante y más cremoso)
Si optas por la vaina de vainilla, abre la vaina a lo largo y raspa cuidadosamente las semillas. Coloca las semillas y la vaina en el vaso del Thermomix junto con la leche. Programa 10 minutos a 90 °C y velocidad 1 para que la leche se impregne de todo el aroma. Luego, cuela la leche con un colador fino para eliminar la vaina y obtener una textura lisa.
Si usas extracto de vainilla, no es necesario este paso; incorpóralo directamente a la mezcla en el siguiente paso.
En el vaso, añade la leche infusionada o la fresca, el azúcar, la fécula y el extracto de vainilla si no has usado vaina. Programa 7 minutos a 90 °C y velocidad 4. Durante este tiempo, la fécula espesará la mezcla hasta obtener esa textura cremosa característica.
Si al terminar la textura te parece demasiado líquida, no te preocupes: añade 1-2 minutos más para que termine de tomar cuerpo.
Para conseguir ese brillo y cremosidad extra que enamora a primera vista, incorpora la mantequilla o margarina y mezcla 10 segundos a velocidad 3. Este paso es opcional, pero marca la diferencia para presentaciones más profesionales.
Vierte la crema en un bol y cúbrela con film transparente en contacto directo con la superficie, evitando que se forme esa molesta costra. Deja enfriar completamente y conserva en la nevera hasta el momento de usar.
Esta crema es la base perfecta para múltiples postres: rellena tartaletas, profiteroles, milhojas o simplemente sírvela con fruta fresca. También es ideal para quienes quieren evitar el huevo sin renunciar a un postre clásico.
¿Quieres darle un giro? Añade un toque de licor de naranja o ralladura de cítricos para un aroma especial. Si te apetece una crema de vainilla vegana, usa leche y margarina vegetal y tendrás un postre apto para todos.
Fácil y rápida: la Thermomix automatiza todo, lo que facilita la vida incluso a los cocineros más novatos.
Versátil y adaptable: puedes usar diferentes tipos de leche y endulzantes, ajustando al gusto o necesidades dietéticas.
Sabor auténtico: la vaina de vainilla le aporta un aroma natural difícil de conseguir con extractos industriales.
Perfecta textura: sin riesgos de que se corte, ni sabores a huevo, la fécula garantiza una crema homogénea y suave.
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