Si tienes bebés en casa o si cuentas con nietos y sobrinos pequeños que te visitan periódicamente, ten presente que gracias a esta propuesta lo que vas a conseguir es poder facilitarte el tener a la temperatura adecuada su alimento.
A continuación, todos los datos a tener en cuenta.
A la hora de proceder a acometer la acción que nos ocupa son tres fundamentalmente los elementos que necesitas: un potito, agua y tu robot de cocina. Sencillo, ¿no?
Una vez que ya tienes claro qué productos tienes que poseer en la cocina, llega el momento de acometer el proceso, que es rápido y sencillo:
Lo primero es que eches agua en el vaso de la Thermomix.
A continuación, introduce en el cestillo el potito de manera horizontal y sin quitarle la tapa.
Después llegará el momento de proceder a programar el proceso. En concreto, debes ponerle a velocidad 3, temperatura varoma durante un tiempo aproximado de 7 minutos.
Y ya está. Ya tendrás listo el potito para dárselo al bebé. Eso sí, este truco te lo hemos planteado con un envase de comida de unos 250 gramos aproximadamente. De ahí que si el frasco es más grande, debas aumentar el tiempo que permanece en el robot de cocina.
No, no es necesario usar Thermomix para calentar potitos. Existen varias formas de calentarlos, como en el horno, en la estufa o en el microondas.
Sí, es seguro calentar potitos en la Thermomix. Siempre y cuando se sigan las instrucciones del fabricante para su uso.
No, no es necesario precalentar la Thermomix antes de calentar los potitos. El calentamiento se realiza directamente en la Thermomix.
El tiempo de calentamiento varía dependiendo del tipo de potitos y la cantidad. Se recomienda comprobar la temperatura interna antes de servir.
Los potitos estarán listos cuando alcanzas la temperatura deseada. Se recomienda comprobar la temperatura interna antes de servir.
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