tomate frito casero con Thermomix

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Preparación de tomate frito casero con Thermomix

1. Una vez que has reunido todos esos ingredientes en la cocina, llega el momento de ponerse el delantal y comenzar a seguir estas indicaciones:
2. Lo primero será pelar el ajo y la cebolla así como cortarlos en trozos.
3. Hay que verter el aceite de oliva en el vaso del robot y programarlo a
4. velocidad 1 / temperatura Varoma / 3 minutos
5. Después se añadirán la cebolla y el ajo. Se programará la Thermomix a
6. velocidad 5 / 10 segundos
7. Luego se volverá a programar, en este caso a
8. velocidad 3 y medio / temperatura Varoma / 7 minutos
9. El siguiente paso será el de proceder a añadir el resto de ingredientes y programar el robot a
10. velocidad 1 / temperatura Varoma / 30 minutos
11. De esta manera tan sencilla se tendrá listo un tomate frito casero exquisito.
12. Este deberá conservarse en recipientes convenientemente cerrados y esterilizados.
13. Así se podrá utilizar para darle forma a salsas, como acompañamiento, como ingrediente esencial para pizzas...

Preguntas Frecuentes sobre la receta de tomate frito casero con Thermomix

1. 1. ¿Puedo usar tomates enlatados en lugar de naturales?
2. Sí, puedes usar tomates enlatados si no tienes tomates naturales disponibles. Asegúrate de verificar la calidad del producto.
3. 2. ¿Qué platos puedo mejorar con este tomate frito casero?
4. Este tomate frito es versátil y puede elevar el sabor de salsas, pastas, guisos y más. ¡Explora tu creatividad culinaria!
5. 3. ¿Se puede reducir el tiempo de cocción?
6. La cocción lenta es clave para desarrollar sabores profundos, pero si estás apurado, puedes cocinar a fuego medio-alto durante menos tiempo.
7. 4. ¿Cómo puedo esterilizar los recipientes de almacenamiento?
8. Lava los recipientes en agua caliente con jabón y esterilízalos hirviéndolos durante unos minutos antes de usar.
9. 5. ¿Puedo ajustar las especias según mi preferencia?
10. ¡Por supuesto! La receta es adaptable. Experimenta con las cantidades de sal, azúcar y pimienta para satisfacer tu paladar.

¿se puede congelar el tomate frito casero ?

1. Sí, definitivamente puedes congelar el tomate frito casero. Congelar el tomate frito es una excelente manera de conservarlo y prolongar su vida útil. Aquí tienes algunos pasos a seguir para congelar el tomate frito casero:
2. Preparación: Asegúrate de que el tomate frito esté completamente enfriado antes de proceder con el proceso de congelación.
3. Porciones individuales: Si es posible, divide el tomate frito en porciones individuales antes de congelarlo. Esto facilitará descongelar solo la cantidad que necesitas en cada ocasión.
4. Envase adecuado: Utiliza recipientes herméticos para congelar el tomate frito. También puedes usar bolsas de congelación resistentes o envoltura de plástico para alimentos, asegurándote de eliminar el exceso de aire para prevenir la formación de cristales de hielo.
5. Etiquetado: Etiqueta cada recipiente o bolsa con la fecha de congelación para que puedas controlar el tiempo que ha estado congelado.
6. Congelación: Coloca las porciones de tomate frito en los recipientes elegidos y asegúrate de dejar un poco de espacio en la parte superior, ya que los líquidos tienden a expandirse al congelarse. Cierra herméticamente.
7. Almacenamiento: Coloca los recipientes en el congelador en una posición plana para que el tomate frito se congele uniformemente.
8. Descongelación: Cuando desees utilizar el tomate frito congelado, simplemente transfiere la porción que necesitas al refrigerador y déjala descongelar lentamente durante unas horas o durante la noche. También puedes descongelarlo suavemente en el microondas utilizando la configuración de descongelación.
9. Uso: Una vez descongelado, puedes calentar el tomate frito en una sartén a fuego medio-bajo o en el microondas. Revuelve ocasionalmente para asegurarte de que se caliente de manera uniforme.
10. Recuerda que, aunque congelar el tomate frito casero es una excelente manera de conservarlo, es posible que la textura pueda cambiar ligeramente después de la descongelación. Sin embargo, seguirá siendo seguro para comer y mantendrá su sabor delicioso en muchas preparaciones culinarias.