¿Te apetece una pizza pero no quieres caer en la trampa del exceso? Aquí tienes la solución perfecta: minipizzas margarita de calabacín en freidora de aire.
Una receta saludable, sin harinas, lista en menos de 20 minutos y con todo el sabor de la clásica pizza italiana, pero con un giro vegetal que engancha.
Las pizzetas de calabacín son ideales como entrante, snack, cena ligera o incluso para niños que reniegan de las verduras. Con solo seis ingredientes y una buena airfryer, puedes conseguir unas bases crujientes por fuera, jugosas por dentro y cubiertas con queso fundido, salsa de tomate, orégano y albahaca fresca. Suena bien, ¿verdad?
🥒 1 calabacín mediano
🧂 Sal al gusto
🧴 Aceite de oliva virgen extra
🍅 2 cucharadas soperas de salsa de tomate
🧀 50 g de queso rallado (mozzarella o mezcla para pizza)
🌿 Orégano seco al gusto
🌱 Hojas de albahaca fresca para decorar
Lava el calabacín y córtalo en rodajas finas, de unos 2 mm de grosor. No hace falta pelarlo.
Coloca papel de horno en la cesta de tu freidora de aire y píntalo ligeramente con aceite de oliva. Dispón las rodajas de calabacín sin montarlas unas sobre otras y añade una pizca de sal por encima.
Programa la freidora a 200 °C durante 10 minutos. Esto ayuda a que el calabacín se cocine y pierda parte del agua.
Cuando las rodajas estén listas, sácalas y añade sobre cada una una cucharadita de salsa de tomate, una buena cantidad de queso rallado y orégano seco.
Vuelve a introducirlas en la airfryer, esta vez durante 5 minutos a 200 °C, o hasta que el queso esté completamente fundido y burbujeante.
Sácalas, deja que reposen un par de minutos y espolvorea con albahaca fresca picada justo antes de servir. Y ya tienes tus minipizzas listas para devorar.
Opción vegana: usa queso vegetal rallado y asegúrate de que la salsa de tomate no lleve azúcar añadido.
Más sabor: añade una rodajita de champiñón, una aceituna negra o un toque de pesto encima antes del horneado final.
Para niños: deja que ellos decoren las pizzetas con los toppings que más les gusten. ¡Diversión asegurada!
Estas minipizzas de calabacín en freidora de aire son la prueba de que comer sano no tiene por qué ser aburrido. Son rápidas, versátiles, llenas de sabor y perfectas para improvisar una cena sin complicaciones. Y lo mejor: ¡nadie echará de menos la masa!
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