Jesús, si todavía crees que la freidora de aire es solo para patatas y nuggets, prepárate para una revelación en forma de chips de remolacha. Estos discos crujientes y coloridos son una auténtica joya: sanos, fáciles, bonitos y más adictivos que las pipas. Y no, no hace falta ser vegano ni influencer de recetas saludables para enamorarse de ellos.
La remolacha es dulce, terrosa y muy fotogénica. Convertida en chip gracias al calorcito del aire, se transforma en un snack con textura perfecta y sabor único. Nada de frituras grasientas ni paquetes industriales con conservantes: solo necesitas 3 ingredientes y un poco de paciencia para cortarlas finas.
Chips de remolacha en freidora de aire – air fryer
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🥬 2 remolachas medianas (mejor si son firmes y frescas)
🫒 ½ cucharada de aceite de oliva
🧂 ½ cucharadita de sal
💡 Opcional pero muy recomendable:
🧄 Ajo en polvo
🌶️ Pimentón ahumado
🍯 Una pizca de canela (para los valientes del dulce-salado)
Lava y pela las remolachas. No queremos tierra ni texturas raras. Usa guantes si no quieres manos color fucsia toda la tarde.
Corta fino: Usa una mandolina para sacar láminas de 3 mm de grosor (1/8 de pulgada). Si no tienes, un cuchillo afilado y un pulso firme también sirven, pero tómate tu tiempo.
Seca las rodajas: Muy importante. Usa papel absorbente o un paño limpio para eliminar la humedad de las láminas. Esto marca la diferencia entre chip y lámina blanducha.
Condimenta: En un bol grande, mezcla las remolachas con el aceite y la sal. Asegúrate de que todas las láminas queden bien recubiertas. Si te animas con otros condimentos, este es el momento.
Cocina en la freidora de aire:
Precalienta a 175 °C (350 °F).
Coloca las rodajas en una sola capa en la cesta o bandeja, dejando espacio entre ellas.
Cocina durante 10 minutos, revisando a partir del minuto 8.
Enfría para el crunch: Al sacarlas, verás que algunas aún están ligeramente blandas. No te preocupes: al enfriarse, se vuelven más crujientes. Déjalas reposar sobre una rejilla o papel absorbente.
No las amontones: La clave está en cocinarlas en una sola capa. Hazlo en tandas si hace falta, pero no caigas en la tentación de meterlas todas a la vez.
Vigílalas de cerca: Cada freidora de aire es un mundo. Algunas rodajas finas pueden cocinarse antes y pasar de crujientes a chamuscadas en segundos. Revisa a partir del minuto 8 y retira las que estén listas.
Personaliza los sabores:
Para algo ahumado: añade pimentón ahumado.
Para un toque dulzón: prueba con canela y un poco de sal marina.
Para un punch de umami: espolvorea queso parmesano rallado en los últimos minutos.
Acompaña con dip: Si te da por lucirte, sírvelas con un dip de yogur y limón, hummus o guacamole. Pura fantasía vegetal.
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