Los San Jacobos de calabacín en freidora de aire son la prueba de que no hace falta renunciar al placer para comer ligero. Esta versión combina la suavidad del calabacín fresco con el sabor intenso del jamón y el queso fundido, todo envuelto en un rebozado crujiente que conquista desde el primer bocado. Además, al cocinarlos en freidora de aire, conseguimos dorarlos sin necesidad de sumergirlos en aceite, reduciendo calorías y manteniendo un acabado perfecto.
Perfectos para un picoteo rápido, una cena improvisada o como acompañamiento sofisticado para cualquier plato, estos San Jacobos tienen la ventaja de ser personalizables: puedes elegir tu queso favorito, añadir especias al pan rallado o incluso cambiar el jamón por pavo o bacon para variar los sabores.
San Jacobos de calabacín en freidora de aire
🥒 2 calabacines medianos
🥓 4-6 lonchas de jamón
🧀 4-6 lonchas de queso (gouda, cheddar o tu preferido)
🌾 Harina
🥚 2 huevos
🍞 Pan rallado
🧂 Sal y pimienta al gusto
🫒 Aceite en spray o un poco de aceite para pincelar
Lava los calabacines y córtalos en tiras anchas de aproximadamente 0.5 cm de grosor usando una mandolina. Salpimienta las tiras y deja reposar unos 5 minutos para que suelten un poco de agua.
Coloca una loncha de jamón y otra de queso entre dos tiras de calabacín, formando un sándwich compacto.
Pasa cada San Jacobo primero por harina, luego por huevo batido, y finalmente por pan rallado. Para un extra de sabor y textura, puedes mezclar pan rallado con parmesano rallado.
Precalienta la freidora de aire a 200 °C (aprox. 390 °F). Coloca los San Jacobos lo más cerca posible de la resistencia, sin sobrecargar la cesta.
Rocía o pinta con aceite la cara superior de cada San Jacobo. Programa la freidora por 6-8 minutos hasta que estén dorados, luego dales la vuelta, pinta el otro lado con aceite y cocina otros 4-6 minutos. Ajusta los tiempos según el grosor de las tiras y la potencia de tu freidora.
Retira con cuidado y sirve caliente. Puedes acompañarlos con una salsa ligera, ensalada fresca o un toque de mostaza dulce para un contraste delicioso.
No sobrecargues la freidora: hazlos en tandas para asegurar un dorado uniforme.
Mezcla pan rallado con parmesano para un extra crujiente y sabroso.
Ajusta los tiempos según el grosor del calabacín y la potencia de tu freidora: los primeros pueden requerir un par de minutos más.
Puedes probar con otros rellenos, como pavo, bacon o incluso verduras asadas para una versión vegetariana con queso fundido.
NOTA: RECETAS INTERESANTES PARA ESTE NUEVO AÑO... Seguro que también os interesan estas recetas