La repostería casera tiene ese encanto de lo simple, lo acogedor y lo delicioso. Pero, seamos sinceros, ¿quién quiere encender el horno en pleno verano o esperar eternidades para hornear una bandeja de galletas? Aquí entra en juego la heroína moderna de la cocina: la freidora de aire. Y estas galletas de mantequilla en Airfryer son la prueba de que el sabor de la infancia y la comodidad del presente pueden ir de la mano.
Con una textura crujiente por fuera y tierna por dentro, estas galletas no solo se preparan en menos de media hora, sino que además no necesitan más que unos ingredientes básicos que seguro ya tienes en tu despensa. Además, si usas papel de hornear y las enfrías bien al final, el resultado es profesional sin esfuerzo.
Galletas de mantequilla crujientes y doradas en freidora de aire – airfryer
Antes de seguir… ¡Te invitamos a nuestras redes sociales para que no te pierdas ninguna receta para tu freidora de aire!
(Si prefieres hacerlas más grandes, ajusta el tiempo de cocción)
🧈 100 g de mantequilla (mejor si está a temperatura ambiente o derretida)
🥚 1 huevo
🍬 150 g de azúcar moreno (puedes combinar con azúcar blanco si lo prefieres)
🌾 375 g de harina de trigo común
🍦 ½ cucharadita de esencia de vainilla
🥛 60 ml de leche entera o vegetal
Si te apetece tunearlas, puedes añadir chips de chocolate, nueces picadas o un toque de ralladura de naranja.
En un bol grande, bate el azúcar, el huevo, la leche y la vainilla con varillas manuales o una batidora hasta que obtengas una mezcla líquida, suave y uniforme.
Incorpora la mantequilla derretida y remueve con las varillas hasta integrarla bien. Verás cómo la mezcla se vuelve más cremosa.
Añade la harina tamizada poco a poco y mezcla con una espátula o con las manos limpias hasta que la masa no se pegue y quede consistente. Si hace falta, espolvorea un poco más de harina.
Guarda la masa en la nevera durante 20-30 minutos para que se endurezca y puedas manejarla mejor.
Saca la masa, estírala con un rodillo sobre papel de horno y córtala con moldes o con un vaso pequeño. Intenta que tengan el mismo grosor (5-7 mm) para que se cocinen por igual.
Coloca las galletas sobre papel vegetal dentro de la cesta de la freidora de aire. Cocina a 180ºC durante 7-8 minutos. No las amontones: déjales espacio para expandirse.
Sácalas y déjalas enfriar sobre una rejilla. Al principio estarán blanditas, pero cuando se enfríen, tendrán esa textura crujiente perfecta.
No sobrecargues la cesta: si las haces en tandas, quedarán mucho mejor.
Puedes hacer una versión con harina integral o añadir una cucharadita de canela para darle un toque especiado.
Las galletas se endurecen al enfriar, no te pases con el horneado o quedarán secas.
Congela la masa ya cortada y sácala solo cuando quieras galletas recién hechas.
No hace falta ser pastelero ni tener horno para disfrutar de unas galletas de mantequilla con sabor casero, textura perfecta y hechas en un suspiro. Si tienes una freidora de aire, tienes el poder de convertir unos pocos ingredientes humildes en un capricho glorioso. Y lo mejor: sin sudar la gota gorda ni ensuciar media cocina.
Guárdalas en un tarro de cristal (si es que sobran) y sorprende a todos con esta receta que huele a hogar y sabe a gloria.
¿Quién dijo que lo simple no podía ser espectacular? 💛🍪🌀
NOTA: RECETAS INTERESANTES PARA ESTE NUEVO AÑO... Seguro que también os interesan estas recetas