Jesús, si hay un tubérculo que nos ha dado más alegrías que disgustos, es la patata. Pero no cualquier patata: hoy vamos a hablar de las patatas al romero en freidora de aire, un clásico que huele a campo, sabe a gloria y se hace sin ensuciar la cocina ni pasarte horas frente al horno.
La combinación de romero, pimentón y aceite de oliva virgen extra convierte unas patatas humildes en un bocado con alma de tapa de gastrobar. Son perfectas como guarnición, para mojar en cualquier salsa o simplemente para devorarlas solas como snack deluxe. Y sí, todo esto sin freírlas en aceite ni encender el horno. Milagros del aire caliente.
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🥔 1 kg de patatas pequeñas (tipo baby o medianas, pero quepan en la freidora)
🫒 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
🌶️ 2 cucharaditas de pimentón en polvo (dulce, picante o mezcla, según tu gusto)
🌿 Romero fresco o seco, al gusto (cuanto más aromático, mejor)
🧂 Sal, al gusto (mejor echarla al final)
Lava y corta: Lava bien las patatas para quitarles cualquier rastro de tierra. Sécalas con papel absorbente y córtalas por la mitad. Si son más grandes, en cuartos.
Mezcla mágica: En un bol grande, mezcla el aceite, el pimentón y el romero. Añade las patatas y remueve bien para que se impregnen por todas partes. Puedes usar las manos, como si estuvieras masajeando un buen chuletón. Terapéutico.
Hora de freír sin freír: Precalienta la freidora de aire a 180 ºC. Coloca las patatas en la cesta sin amontonarlas demasiado. Cocínalas durante 20 minutos, sacudiendo o removiendo a la mitad del tiempo para que se doren de forma uniforme.
El toque final: Sácalas cuando estén doradas, crujientes por fuera y tiernas por dentro. Añade sal al gusto justo al sacarlas, para que no se resequen durante la cocción.
Estas patatas son tan versátiles que merecen ir más allá del filete de turno. Aquí van unas ideas:
Con alioli suave o mostaza antigua
En una ensalada templada con rúcula, queso feta y tomate seco
Como base para un brunch con huevo poché por encima
Espolvoreadas con parmesano rallado al salir de la Airfryer, para darle un toque italiano brutal
Y si te sobran (aunque lo dudo), al día siguiente las puedes calentar y servir con huevos revueltos o en un bocadillo con jamón asado. De locos.
¿Quieres que tu Airfryer saque humo de tanto usarla? Esta receta de patatas al romero es tan fácil, rápida y deliciosa que vas a querer repetir cada semana. Y lo entenderemos. Porque cuando una receta te hace sentir que puedes comerte el mundo, hay que compartirla.
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