Los albaricoques son un fruto con la apariencia de un pequeño melocotón, se caracterizan por tener un color anaranjado y una textura suave. La mejor temporada para su consumo es el final de la primavera, se trata de la época en la que más jugosos están.
Los albaricoques deben comerse cuando hayan madurado, porque cuando aún están verdes pueden resultar un alimento muy indigesto. Un producto muy famoso que deriva del albaricoque son los orejones que se obtienen tras pelar y dejar al sol un albaricoque para que pierda el agua, esto produce una concentración de nutrientes. Aunque los orejones contengan más azúcar que los albaricoques frescos, también son más ricos nutricionalmente.
Entre los aspectos nutricionales más destacados, los albaricoques destacan por su contenido en vitamina C que se trata de un antioxidante que favorece la reducción de los niveles de colesterol, además de prevenir enfermedades cardiovasculares. Contienen también una gran cantidad de calcio, muy importante para el desarrollo y mantenimiento de los huesos, por esto es especialmente recomendado su consumo para niños y para ancianos.
El alto contenido en fibra de los albaricoques favorece al tránsito intestinal y revienen enfermedades estomacales, además al ser bajos en calorías se trata de un alimento ideal para perder peso.
Aunque se suelen comer frescos, también se preparan mermeladas y zumos con esta fruta. Además los orejones suelen ser utilizados en guisos muy variados, por esto si quieres probar a preparar algo nuevo con la ayuda de Thermomix ahora es tu momento. ¡Aquí tienes una serie de recetas con albaricoques para Thermomix!
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